Para reiniciar esta nueva temporada 2022 con mis columnas de opinión, quiero inicialmente agradecer a Dios, que pone sabiduría y generosidad en mis letras y a la dirección de tsmnoticias.com por haberme permitido sin ningún veto, escribir durante un año completo, lo que hice los días miércoles de cada semana, y con ello logré encontrar un espacio para orientar la opinión pública respecto de temas relacionados con la política nacional y regional.
Quiero contarles que miré con detenimiento una excelente película, tal vez una de las mejores de 2021, titulada “No mires arriba” y les cuento que es estupenda y aplica con exactitud en nuestra actual situación social, política y económica del país y de nuestro departamento
Por ello intentaré que a través de un símil, podamos entender que debemos hacer un cambio de actitud, puesto que luego de estos dos años de pandemia, comprendimos que la ciudadanía podría vivir sin los políticos tradicionales y mentirosos, aquellos que tienen un vicio y una ambición por el poder (el económico), pues si consideramos que la película señala el descubrimiento de “un meteorito de grandes dimensiones que se acerca a la Tierra y amenaza con destruirla por completo, es el apocalipsis que se acerca, pero nadie quiere mirar hacia arriba.
No quieren los políticos, que solo piensan en cómo sus decisiones podrían afectarles en las urnas o en su imagen pública, y no quiere la gente, que escéptica y explotada por la sociedad del consumo y prefiere ignorar estas alertas. Y los únicos que sí quieren mirar es para averiguar cómo sacar el máximo beneficio de la tragedia inminente”.
El director cuenta que leyó un informe de la ONU en 2018 que describía el consenso científico sobre los efectos del cambio climático y se asustó y dijo “oye tenemos que encargarnos de esto, esto es una locura de mierda. Está sucediendo ahora. No será dentro de 80 años, es ahora”.
Allí vi un reflejo del caos, la ignorancia y las desgracias de los tiempos de pandemia que nos ha tocado vivir, se nota la ignorancia a las advertencias de los científicos frente a la decadencia de los ecosistemas en el mundo donde está en juego no el capital sino la misma raza humana, y a los gobiernos, los políticos tradicionales eso no le afecta ni les importa, ellos viven el ahora y ya; sin embargo, es acertado que hoy el único candidato a la presidencia de Colombia ponga sobre la mesa la discusión sobre si queremos más exploración petrolera y de minerales en contra de la humanidad o si por el contrario empezamos ya a desacelerar la búsqueda y explotación en un proceso de transición bastante largo pero que para Petro en su gobierno iniciara ya.
También miré la crítica a los periodistas, en nuestro caso aplica para las dos cadenas de televisión nacional: RCN y Caracol y diarios como El Tiempo y El Espectador, como la hoy descontextualizada revista Semana, donde solo pretenden que la opinión pública no mire para arriba donde encontrarán los problemas (corrupción) y las soluciones, que en nuestro caso es un cambio de las castas políticas y quitarles el poder a unas cuantas familias que tienen al país arrodillado a sus caprichos y solo cuando los ciudadanos reconozcan el poder del voto, renuncien al contratico indigno y la dadiva temporal, y se decidan por intentar por otro camino también democrático, reconociendo sin miedos a aquellos que poseen el capital y poseen el poder en nuestro sistema capitalista.
Unos gobiernos que se hacen minúsculos frente al poder económico de unos cuantos empresarios, pues las noticias nos dicen que la economía va bien, sí la de ellos y la del país capitalista, pero a sus ciudadanos les va muy mal, sin empleo, sin comida, los campesinos quebrados, los TLC en franca guerra hacia el interior del país; en fin, miles de situaciones calamitosas que ellos no quien que miren encima de sus cabezas, esas “relaciones de poder intoxicadas entre políticos y las élites económicas”.
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Por: Juan Felipe Molano Perdomo – jmolano74@hotmail.com
Twitter: @JuanFelipeMola8