Atrás ha quedado la imagen negativa que la sociedad huilense tuvo en otrora cuando soportamos los taponamientos y las protestas sociales propiciadas por mingas indígenas, quienes se tomaron las vías con el fin de exigir el cumplimiento de los acuerdos firmados con el gobierno nacional y que en su mayoría han sido incumplidos por las instancias nacionales. Durante semanas tuvimos que soportar la parálisis de la dinámica productiva de la región surcolombiana.
Igualmente, la debilidad del ejecutivo para atender estas demandas sociales y permitir los bloqueos que eran direccionados por el sector de la oposición que solo buscan tomarse el poder en el 2022, aprovechando el descontento popular por la aplicación incoherente de los instrumentos de la política macroeconómica del país, que han generado más pobreza y un aumento de las inequidades sociales y económicas.
Por este motivo, queremos destacar desde esta tribuna, el accionar del gobierno departamental, en cabeza de Luis Enrique Dussán López, que, junto con su equipo de trabajo, han venido trabajando incansablemente para formular una política pública para apoyar a los resguardos indígenas que se encuentran ubicados en las zonas occidente y norte del territorio huilense.
Por este motivo, el programa estructurado por el gobierno departamental “El buen vivir y la salud, desde los territorios indígenas del Huila”, ha logrado articular al Consejo Regional Indígena del Huila para que haga parte del Plan de Intervenciones Colectivas que viene adelantando la Secretaría de Salud Departamental.
Así el tejido de Salud y Medicina Tradicional de esta organización han empezado a realizar acciones territoriales con enfoque intercultural, en el marco de la implementación del Plan de Intervenciones Colectivas PIC liderado por la Secretaría de Salud Departamental.
Las mingas de pensamiento del buen vivir desde la salud en los territorios indígenas, se realizan con el propósito de dialogar con las autoridades políticas hacia el fortalecimiento de los procesos organizativos territoriales, por lo tanto, estos espacios permiten reafirmar los procesos de salud, ante la pandemia que afronta el mundo hoy, así como las demás problemáticas en torno a la salud.
Se destaca la manera como el PIC Departamental vienen recorriendo estas comunidades para escuchar y conocer de primera mano a los mayores, mujeres, jóvenes y niños que han venido dinamizando los procesos comunitarios desde el plan de vida de cada resguardo, cabildo o asentamiento. Se busca fortalecer los procesos comunitarios locales, zonales y regionales en beneficio de toda la población indígena del Huila.
Igualmente, con el personal de esta dependencia, se trabaja permanentemente desde los tejidos locales de salud de manera organizada en el fortalecimiento de la medicina propia y de la implementación del Modelo de Salud Intercultural y del Buen Vivir de nuestros pueblos, en pro de fortalecer lo cultural desde el gobierno propio y los blindajes territoriales de los resguardos y/o cabildos indígenas.
Es indispensable que el Estado siga estructurando estrategias concretas para este importante sector de la sociedad colombiana, que con su accionar y sus palabras y la emoción, que éstas transmiten, tienen pleno sustento en una realidad que pide a gritos acciones concretas para protegerlos y que permitan avanzar en la senda de una protección real y efectiva de estas comunidades.
Los líderes de la minga deben replantear sus aspiraciones maximalistas y, con mayor realismo, concentrarse en la búsqueda de un entendimiento que muy pronto se traduzca en mejoras tangibles para su gente, aprovechando que el Gobierno mantiene su disposición para dialogar y buscar acuerdos factibles que minimicen el riesgo de incumplimientos que, a la postre, sean la cuota inicial de una nueva crisis en el corto plazo.