El jugador del Atvidabergs logró anotar uno de los tantos más espectaculares del año.
El jugador recibió el balón y remató haciendo un escorpión.
El portero del Gefle poco pudo hacer aparte de admirar el talento de Skrabb.
El futbolista ni siquiera podía crearse que la pelota hubiera entrado… ¡Y de qué forma!