Comúnmente a los padres les encanta dar consejos a sus hijos; pero, a sus 18 años, el tirador georgiano Tsotne Machavariani tiene una poderosa razón para escuchar a su progenitora cuando compita este verano en los Juegos de Rio 2016.
Y es que su madre es nada menos que Nino Salukvadze, que ya ha participado en siete Juegos Olímpicos, ganó el oro en los Juegos Seúl 1988 y ha ganado seis campeonatos del mundo en tiro.
Para Salukvadze, Río 2016 serán sus octavos Juegos, y además unos muy especiales, porque competirá junto a su hijo, la primera vez que madre e hijo disputan juntos unos Juegos.
“Estoy muy feliz y muy orgullosa de que me vean competir al lado de mi hijo”, dijo a Reuters. “Haremos todo lo posible para hacerlo muy bien, pero, sinceramente, soy una madre y, antes de todo, seré la mayor fan de mi hijo”, explicó.
El tiro es un deporte individual, pero los miembros de la familia entrenan juntos a las órdenes de Vakhtang Salukvadze, que no sólo es su entrenador, sino también el padre de Nino y el abuelo de Tsotne.
Salukvadze representó a la Unión Soviética en sus primeros Juegos Olímpicos cuando tenía 19 años, en Seúl 1988, donde consiguió la medalla de oro en la prueba de pistola 25 metros y el bronce en pistola de aire 10m. En Pekín 2004 obtuvo el bronce en pistola de aire comprimido.
Desde 1996 y tras la desintegración de la Unión Soviética, compite representando a Georgia, país del que fue abanderada en los Juegos Londres 2012.