Caza Architects, un estudio de diseño con base en Nueva York, y sedes en Manila y Bogotá, liderado por el reconocido arquitecto Carlos Arnaiz catalogado como uno de los 50 mejores arquitectos del mundo menores de 50 años, está desarrollando proyectos que tienen en cuenta al medio ambiente y el impacto que las construcciones tienen sobre la naturaleza y la sociedad.
El arquitecto colombo-filipino pretende fomentar en sus proyectos la eficiencia energética, la recolección de aguas lluvias y el aprovechamiento de los recursos naturales para que sus construcciones no tengan impactos negativos con el medio ambiente. Carlos Arnaiz y su equipo de trabajo ponen en consideración al desarrollar un proyecto las condiciones climáticas, la hidrografía y los ecosistemas del entorno en que se construyen sus edificaciones, para obtener así, el máximo rendimiento con el menor impacto. Según Arnaiz: “La sostenibilidad en los proyectos arquitectónicos debería ser una obligación y no una tendencia”.
Uno de los proyectos de mayor impacto ambiental desarrollados por Caza Architects es el primer Sistema de Transporte Masivo recientemente inaugurado en Cebú, la ciudad más grande de Filipinas. Además de tener el sistema una apariencia atractiva para sus habitantes, el arquitecto pensó en darle a la obra una estructura que ayudara a disminuir el riesgo de inundaciones en la ciudad, introduciendo un esquema que asimismo, recogiera las aguas lluvias que intensamente caen en Filipinas, para reutilizarlas y que pasen a través de unos tubos y lleven el líquido a unos estanques ubicados debajo de las estaciones a fin de llevar el agua directamente a las raíces de la planta, evitando la evaporación y reduciendo drásticamente la cantidad de agua necesaria para el riego. Planificar un sistema de recolección de aguas de lluvias con un Sistema de Transporte masivo se convierte en un atractivo para el impulso de nuevas técnicas en la arquitectura sostenible.
“La eficacia y moderación en el uso de materiales de construcción es fundamental para concebir el diseño arquitectónico de manera sustentable, buscando optimizar recursos de tal modo que minimicen el impacto ambiental de las construcciones sobre el medio ambiente y sus habitantes”, afirma Carlos Arnaiz.
Otro proyecto importante en términos ecológicos desarrollado por Carlos Arnaiz y su equipo, es la “Casa con muchas Lunas” [HOUSE OF MANY MOONS], localizada en Filipinas. Esta es una casa refugio situada a las afueras del área metropolitana de Manila, una estructura concebida con el objeto de aprovechar recursos tales como la luz solar y las corrientes de aire, para aumentar la eficiencia energética y reducir el impacto ambiental. Los visitantes se encuentran con un sistema de cerramiento que permite la entrada de una gran cantidad de luz natural en las habitaciones y al mismo tiempo, debido al diseño espacial de las mismas, la luz solar no penetra completamente en dichos dormitorios, el techo y las zonas altas de la pared quedan iluminadas por lo que las zonas habitables reciben iluminación indirecta y por tanto, menos calor. Los jardines enterrados actúan como chimeneas de ventilación natural, reduciendo el consumo energético. De hecho, la apertura de las puertas correderas en los diferentes niveles crea una corriente de ventilación continua que permite que prácticamente no sea necesario el uso del aire acondicionado.
Estos son algunos de los proyectos desarrollados por Caza Architects que responden no solo a la exigencia del mundo moderno por la conservación y el cuidado de los recursos naturales, sino a la existencia de una nueva generación de arquitectos y diseñadores con estrategias enfocadas a la creación de edificios sostenibles y sustentables capaces de transformar la manera de edificar.
La arquitectura sustentable está definida por pilares que se retroalimentan: el social, el económico, los materiales de construcción y el ambiental. Cada uno de estos pilares debe estar bien fundamentado y deben resguardar los recursos naturales. Según Arnaiz, se debería cambiar la manera de discutir frente a la sostenibilidad que ha estado solamente discutida de forma técnica, en otras palabras, “sólo se trata de la industria de la construcción y las nuevas normas y estándares; dejando de lado la importancia para hacer frente a la crisis ecológica que hemos creado en nuestro planeta”.
Entonces, “el desarrollo de la arquitectura sustentable debe apuntar a incorporar los recursos naturales de manera sostenible, planificando acciones a largo plazo teniendo en cuenta las necesidades de la población, incluyendo las generaciones futuras. Las nuevas edificaciones podrían reducir los efectos ecológicos adversos a través de un mejor diseño”, concluye Arnaiz.
En el año 2015 en Colombia el Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio estructuró una reglamentación de construcción sostenible orientada a establecer los parámetros y lineamientos técnicos relacionados con el uso eficiente de los recursos de agua y energía en nuevas edificaciones. Esta norma, será obligatoria a partir de junio de 2016.