Estas capturas fueron gracias a un operativo conjunto de la Policía y la Fiscalía.
Las autoridades los señalan de ser responsables del atentado con granada de fragmentación ocurrido en el barrio San Bernardo, donde dos personas perdieron la vida.
Los capturados harían parte de una estructura dedicada a la extorsión, el sicariato y el control violento de zonas del centro de la ciudad. La investigación continúa para establecer su vínculo con otros hechos de violencia registrados en la capital.