El presidente Gustavo Petro planteó este viernes la necesidad de replantear la estrategia contra las drogas, tanto en Colombia como en el ámbito global, de comprobarse que la productividad de la hoja de coca en el país se duplicó, tal como lo sostiene un reciente informe de una Agencia de las Naciones Unidas.
“Estamos metidos en algo que no debemos meternos, tenemos que cambiar la estrategia, la táctica, nuestra propia lucha internacional, nuestras relaciones internacionales», manifestó el jefe de Estado en el acto de graduación de 283 subtenientes de la Policía en la Escuela de Cadetes de Policía General Santander.
Subrayó que “este ya no es un problema colombiano, este es un problema americano, hablando de cocaína, y su consumo se volvió un problema global».
El informe al que se refería el mandatario fue revelado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNDOC).
“Cuando llega el informe de Naciones Unidas, hace dos semanas, sobre el año 2023 –no hace el informe este año–, entonces nos dice que la productividad de la hoja de coca se duplicó en un año, eso es lo que me da dudas, porque no he observado ningún cultivo en el mundo que en un año duplique eso, pero sólo digo que son dudas, como todo estudio científico, pues hay que examinar», expresó el mandatario.
Advirtió que “estamos ante otros dueños del narcotráfico. Si yo pongo estas cifras y comparo en los tiempos de Pablo Escobar, los mafiosos de hoy son cinco veces más poderosos. Y la mayoría no son colombianos, son multinacionales internacionales, y tienen la capacidad de comprar misiles, tanques, si quieren, fusiles obviamente, y actuar en nuestro territorio».
Subrayó que ese incremento indica que las mafias del narcotráfico “han reemplazado una especie por otra, es mucho más productiva, lo han hecho, son capaces, tienen el dinero de coger la biotecnología, la genética y adaptar las plantas para que den más cocaína la hoja».
Y resaltó: “Estamos en una guerra de nunca acabar. Si no cambiamos la política, entonces, no vamos a solucionar esto, realmente tenemos que pensar esto: si nos vamos a seguir matando entre nosotros 70 años más, 100 años más. ¿Cuándo va a acabar eso? Esto tiene que cambiar, no puede ser, la sociedad colombiana no puede ser sacrificada».