INACCIONES POR NEIVA: la ciudad gobernada por el Hampa

1035 views
5 mins read

Pasó el manto de euforia y distracción que trajo consigo el San Pedro, y volvemos de golpe a la realidad. Una realidad dura, incómoda y peligrosa. Neiva atraviesa una de las crisis de seguridad más alarmantes de los últimos años.

Ya no hablamos solo de cifras, sino de vidas. La ciudad se desangra día tras día: asesinatos a plena luz del día, atracos con arma de fuego en los barrios y un centro comercial azotado por ladrones, a escasas cuadras del despacho del alcalde.

El miedo ya no es una sensación: es una realidad que se respira en cada esquina. La delincuencia se mueve con libertad, mientras los ciudadanos honrados deben mirar por encima del hombro para salir a trabajar, estudiar o simplemente caminar.

Frente a este panorama, la Secretaría de Gobierno insiste en vender una supuesta reducción de delitos que no se refleja en la vida cotidiana de nadie. Las cifras que entregan parecen diseñadas para justificar la inacción, no para enfrentar la realidad. Resulta ofensivo que en medio de esta tragedia quieran convencernos de que “todo está bajo control”.

Y sí, hay responsables. El secretario de Gobierno y Convivencia, con un salario que está alrededor de los 15 millones de pesos, no ha estado a la altura del cargo. Tampoco el director de Seguridad y Convivencia, Alexis Trujillo, cuya gestión ha sido completamente insuficiente. Ambos han demostrado una desconexión profunda con el clamor ciudadano. No tienen calle, no tienen estrategia, no tienen resultados.

Y mientras ellos se acomodan en el escritorio, el ciudadano de a pie se acostumbra a esquivar balas, a ver morir vecinos, a cerrar el negocio más temprano por miedo a un atraco. ¿Hasta cuándo vamos a aceptar esto como normal? ¿Hasta cuándo va a seguir la Alcaldía dándole la espalda a la ciudad real, la que sufre y resiste sin escoltas ni blindajes?

Esta columna no es solo una crítica. Es también un llamado desesperado, desde la voz de quienes ya no soportan más. De quienes aman esta ciudad y se rehúsan a verla caer en manos del crimen sin que nadie haga nada.

No se trata solo de señalar culpables por la crisis de seguridad: se trata de exigir cambios reales y urgentes. La administración municipal tiene la oportunidad —y la obligación— de replantear su estrategia, depurar su gabinete y convocar a todos los actores: Policía, Fiscalía, Ejército, líderes comunales y comerciantes. Es hora de diseñar un plan integral, transparente y participativo que recupere la confianza ciudadana.

Neiva no puede seguir enfrentando la violencia con discursos vacíos: necesita decisiones valientes, coordinación interinstitucional y presenciaefectiva en los territorios.

El alcalde Germán Casagua debe actuar ya. El gabinete de seguridad se quedó corto, se volvió sordo y arrogante. Es tiempo de un remezón urgente. No podemos esperar más. Cada día que pasa, una familia pierde a un hijo, un hermano, un amigo.

Neiva merece más. Merece autoridad, presencia, valentía. No funcionarios cómodos con su salario. Y estoy convencido de que, así como yo, el alcalde Germán Casagua ama esta ciudad. Es por ese amor que le pido que ejerza acciones concretas desde el interior de su equipo de gobierno que impacten positivamente a la ciudad. Porque Neiva no puede seguir pagando tan caro la cobardía de su dirigencia.

Por: Andrés Felipe Guerrero
Abogado
Especialista Derecho Constitucional y Administrativo

Deja una respuesta

Your email address will not be published.

Ir al contenido