Consternados nos encontramos todos al ver como continúan registrándose semanalmente diversos casos de suicidios.
Según el Observatorio Nacional de Salud (ONS) entre 1998 y el 2012 ocurrieron en el país 33.341 muertes por “Autoeliminación” o Suicidio. Para el caso de nuestro departamento, a la fecha se han registrado 37 casos, – 5,2 eventos mensuales- que comparados a los 54 casos – 4,5 eventos mensuales- del año anterior, genera una negativa expectativa, pues si no se toman medidas de forma extraordinaria, a cierre de este año serían más de 63 las pérdidas que lamentar.
Preocupa en gran manera ver como hay quienes encuentran la solución a sus diferentes problemas en el terrible acto de finalizar su existencia. Y es que precisamente en los últimos 7 años, son más de 338 opitas los que han tomado esta equivocada decisión.
Los 18 casos que se han registrado en Neiva, llevaron a las autoridades a implementar un Plan de Acción Inmediata de Contención, con el cual se espera controlar estos sucesos. Pero, ¿Sera suficiente?
Según la Organización Mundial de la Salud –OMS-, un suicidio se presenta cuando existen problemas de salud mental, y frente a esto, una de cada cuatro personas, sufre en algún momento de su vida un trastorno mental, lo cual amplia el panorama, pues un trastorno mental no es solo la situación que bloquea parcial o totalmente las reacciones mentales, sino también estados anímicos, que afectan el normal desarrollo de la vida, en otras palabras, una mala calificación, un rompimiento amoroso o incluso un llamado de atención, pueden ser desencadenantes de esta situación.
Es en este preciso momento donde se hace relevante la capacidad de creer en algo, pues diversos psicólogos, señalan que el creer, aleja a la persona de tomar la decisión. Y es que creer no se aplica solo al campo religioso, se puede creer en un proyecto de vida, se puede creer en un mejor mañana, se puede creer en otro tipo de habilidades o simplemente creer que si por ahí no nos salieron las cosas como las esperábamos, será por otro camino.
Desafortunadamente esta capacidad –la de creer- se ha perdido como consecuencia al modelo de una sociedad única, donde todos deben pensar igual, donde las diferencias no son permitidas, donde se promulga la libertad de expresión, pero se oprime a quienes defienden sus ideas, donde al acto de discriminar parejas del mismo sexo se denomina “Homofobia” y al de discriminar cristianos “Libertad de Expresión”.
Por esta razón, entendiendo que estamos en medio de una sociedad donde debe reinar el respeto a la diferencia, el Movimiento Político MIRA, en el marco del Acuerdo Por Neiva, ha incluido como uno de los puntos, la creación de una Política pública para la libertad de religión, cultos y conciencia para las diferentes denominaciones religiosas, pues todos tenemos derecho a creer en algo, máxime si esa creencia nos aporta principios y valores para convivir en común unión. y como dicta la carta magna “Nadie podrá ser molestado”, eso es lo que queremos garantizar con esta política pública, que si soy cristiano, católico, evangélico, protestante, ateo o de cualquier creencia, Neiva sea un territorio de respeto, de igualdad de oportunidades y libre de persecuciones, pues si no respetamos nuestras diferencias y extractamos de ellas lo mejor, ¿cómo haremos para crecer en sociedad? Por eso necesitamos de un gran acuerdo por Neiva, para que así entre todos tengamos algo en que creer.
—