Cada año cuando llega esta fecha, renovamos frases, hacemos promesas, redefinimos conceptos, repetimos prácticas, vestimos el pesebre y el tradicional arbolito de navidad con sus adornos y luces de colores, compartimos regalos, disfrutamos la deliciosa comida de la época, participamos de las novenas, nos acercamos a aquél del que estamos distanciados, con deseos de paz, y muchas cosas lindas, que nos muestra un espíritu distinto que rodea a nuestras familias, porque es Navidad.
La Navidad es la época más linda del año, en la cual se destaca la entrega de regalos entre familiares y allegados, evento muy emotivo que nos acerca a los nuestros, pues quién no se emociona entregando o recibiendo un regalo, en especial los niños, quienes se ilusionan y sonríen, por sencillo que sea el regalo, es una muestra de amor.
Pero a pesar que nos acordamos de todas las personas allegadas, fácilmente nos olvidamos de nuestra ciudad, que es nuestra casa, hoy en día iluminada por las luces y decoraciones navideñas, donde familias completas visitamos sus parques, caminamos por la vía peatonal de la Avenida La Toma, la carrera quinta, el Parque Andino y llenos del espíritu de la navidad cuidamos de todos los escenarios que decoran nuestra ciudad.
Una triste realidad es que, pasada la temporada decembrina, nos olvidamos de ella, pero un regalo que podemos darle a nuestra ciudad en navidad y que perdure por el resto del año es mantenerla limpia, cuidar sus parques, no contaminarla y velar por el cuidado del ornato público y los proyectos de infraestructura que se están desarrollando, pues estos cambiarán muy pronto la imagen a nuestra casa.
En esta época de navidad, los neivanos también queremos recibir como regalo de navidad, que nuestra ciudad sea mucho más segura, que se tapen todos los huecos de las principales vías, que el alumbrado público sea eficiente con tecnología LED de punta, que llegue al sector rural, hoy a oscuras y que cuente con una fuente de energía solar para que los gastos que se reduzcan se le transfieran a los neivanos en reducción de la tarifa que hoy se paga, que las basuras se recojan en los horarios establecidos, que arreglen y pongan en funcionamiento el teleférico del Malecón, el cual de paso debe ser embellecido, que los habitantes de calle sean rehabilitados en un centro de rehabilitación rural donde se dediquen a labores agropecuarias, que nuestros niños, niñas y adolescentes tengan derechos prevalentes como lo ordena la Constitución Política, que las mujeres no sean maltratadas, que el agua llegue a nuestros hogares bien tratada y que la no contabilizada se reduzca significativamente, que nuestros parques sean recuperados, en especial, sus zonas verdes las cuales se ven abandonadas, que los agentes de tránsito sean más preventivos que sancionatorios, que se eduque en vez de sancionar, que nuestros vendedores ambulantes sean tratados dignamente y que la administración municipal acelere en el último año de gobierno.
También esperamos recibir como regalo de navidad que por fin tengamos la doble calzada Neiva – Campoalegre que tanta falta nos hace, que por fin se construya la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales PTAR, que se termine la canalización del río Las Ceibas, el Parque de la Música, el Estadio de Futbol, la avenida Circunvalación de Oriente, el nuevo Comando de la Policía Metropolitana de Neiva, que se adelanten campañas masivas y eficientes para resocializar a nuestros jóvenes en drogadicción y muchos regalos significativos como estos, para que tengamos ahí sí, una ¡Feliz Navidad!
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Por: José Ferney Ducuara Castro – josefeducuara@hotmail.com