Gobernadores y alcaldes de todo el país entran en la recta final del mandato que recibieron el 1° de enero de 2016 y va hasta el 31 de diciembre de 2019. Les queda uno de los cuatro años para los que fueron elegidos.
Es, pues, la hora de afinar proyectos, terminar realizaciones, empezar balances y precisar qué le dejan a sus conciudadanos para continuar el camino trazado y mirar el futuro.
Cada cual sabrá responder a la comunidad por lo que hizo y la manera como lo hizo.
Por su parte, el alcalde de Neiva, Rodrigo Armando Lara Sánchez, debe sentir la satisfacción del deber cumplido pues la comunidad ha sabido corresponder a sus esfuerzos y viene expresándole su complacencia por la tarea realizada, que hará de la suya una de las mejores administraciones en toda la historia de la ciudad…
Lo más importante es, sin lugar a dudas, la transparencia en el manejo de los recursos públicos y la eficacia en su ejecución. De ahora en adelante, no será posible a ningún burgomaestre local, contratar las obras públicas solo con su reducido grupo de amigos, los tiempos en que una obra se adjudicaba a dedo entre dos o tres aspirantes han quedado atrás. Y toda la contratación ahora es pública y puede ser consultada por la comunidad en cualquier momento con la posibilidad de hacer observaciones sobre ella.
En un país en que la corrupción sigue en aumento, la ciudad puede decir con orgullo que su administración es pulcra. Ese es el principal legado de Rodrigo Armando Lara Sánchez, que no ha dudado en pedir, recibir y agradecer el apoyo de los gobiernos nacional y departamental y de instituciones como el Ejército y la Policía para obtener los mejores resultados que se ve en las vías de la ciudad, las muchas nuevas y la recuperación de las destrozadas por décadas; en la terminación de los “elefantes blancos” dejados a medio camino por anteriores administraciones; en la recuperación, remodelación y modernización de los establecimientos de educación, abandonados por décadas, y la construcción de nuevas instituciones educativas; la preocupación por el principal problema de la ciudad, los asentamientos urbanos irregulares en zonas inclusive de altísimo riesgo, con la legalización de varios de esos asentamientos a los que se han llevado vías adecuadas y servicios públicos; el apoyo y el incremento de la cultura popular, las orquestas y bandas en barrios, comunas y veredas rurales; la nueva imagen del centro de la ciudad, libre ya su espacio público de las hordas de vendedores informales a quienes se ha ofrecido otra opción de vida; la recuperación de sus fuentes ornamentales; la devoción por continuar las obras del SETP, cuyos majestuosos intercambiadores viales de La Toma y la Universidad Surcolombiana quedaran en servicio durante esta administración; el planteamiento de la ciudad del futuro hecho con el apoyo de Findeter, y finalmente, después de la tragedia provocada en el Estadio de Neiva, y en colaboración con Coldeportes, la terminación de las obras de remodelación.
Se ha hecho mucho, y queda mucho por hacer, pero se ha señalado un camino para hacerlo_ transparencia y eficacia.
Gracias, alcalde Lara.
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Por: Delimiro Moreno – morenodelimiro@gmail.com
Twitter: @opipaisa