El Asma es una enfermedad respiratoria que se presenta en niños y adultos, que gracias a diferentes mecanismos y dispositivos, se puede controlar y llevar de una manera adecuada en cada una de las personas.
Según la doctora Lady Páez Suárez, directora del programa infantil de enfermedades respiratorias de Colsanitas, “Existen tratamientos especializados para niños, ya que son los más vulnerables a esta enfermedad debido a que sus pulmones se encuentran en desarrollo y crecimiento, lo que hace que estén más expuestos y sensibles a virus respiratorios.”
La dificultad que puede tener un niño para respirar durante una crisis asmática ocurre por una inflamación que vuelve tensos a los músculos que rodean las vías aéreas, a la vez que se produce mucosidad que las obstruyen. Durante un episodio de este tipo, el niño puede experimentar unos síntomas característicos de esta enfermedad. A continuación, cinco factores para identificar si su hijo sufre de asma.
1. Episodios de dificultad respiratoria de grado variable: la dificultad para respirar comienza con una sensación de ahogo, es decir, no poder ingresar adecuadamente el aire a los pulmones. El niño que sufre de asma empieza a tomar posiciones de rescate, a hacer jadeos que aceleran la frecuencia respiratoria y la expansión del tórax.
Esta dificultad para respirar puede ir acompañada de cianosis, que consiste en una coloración azul que se presenta en los labios y dedos del niño.
2. Tos: principalmente se trata de una tos seca. Al inicio puede ser leve, pero es el momento oportuno para empezar a suministrar el medicamento de rescate al niño, el más común es el salbutamol. Con el medicamento se controlan los síntomas, se relaja el músculo que cubre la vía respiratoria y permite que circule el aire con más facilidad.
En una crisis asmática, la tos también puede aumentar y dejar de ser seca para volverse húmeda, esto ocurre cuando se empieza a expulsar secreciones. En niños pequeños, la tos puede ser tan fuerte que les produce vómito, en el que expulsan flema, mucosidad y salivación espesa. En niños más grandes la tos es un poco más controlable.
3. Silbido en el pecho: básicamente es un pitido en forma de un chillido audible que proviene del pecho. Se produce por la obstrucción del bronquio cuando está muy inflamado y se dificulta el paso del aire. Este sonido agudo es perceptible cuando se realiza un examen físico.
4. Limitaciones en la actividad física: debido a la dificultad para respirar, el niño también experimenta una sensación de ahogo que le limita realizar actividades como correr o desplazarse con facilidad. También pueden manifestar dolor en el pecho, en el abdomen o en la espalda. Esto es normal porque en el esfuerzo por respirar utilizan músculos accesorios y genera dolor.
5. ¿Qué hacer cuando el niño presenta una crisis asmática? Fundamentalmente se deben usar los medicamentos de rescate para el tratamiento de la crisis. Estos son medicamentos broncodilatadores de acción rápida
Se debe aplicar de acuerdo a las recomendaciones del médico tratante, emplear la técnica inhalatoria adecuada para la edad del paciente, uso adecuado de la inhalocámara y verificación del contenido del inhalador. Además, identificar si hay respuesta favorable ante la aplicación del medicamento, de los contrario tener identificados los servicios de urgencias más cercanos para realizar un traslado oportuno donde continúen con un tratamiento adecuado para la crisis respiratoria.