Ha sido corajudo. Ha mostrado su casta pese a estar con inconvenientes de salud. Nairo Quintana, no se da por vencido y pese al ‘Sueño amarillo’ quedar aplazado se mantiene con el deseo de terminar en el podio en París este domingo. En la dramática etapa de este viernes, que tuvo de todo el ‘escarabajo’, logró llegar a la tercera casilla de la clasificación general y está a 16 segundos de la segunda para repetir lo de 2013 y 2015.
La fracción de hoy entre Albertville y Saint-Gervais Mont Blanc Le Bettex, sobre 146 kilómetros resultó de infarto donde las caídas fueron protagonistas dejando ‘magullados’ a varios corredores como fue a Chris Froome y la perdida de sus posiciones de Bauke Mollema y Adam Yates.
Queda la jornada de este sábado donde Nairo Quintana espera dar el zarpazo para llegar a la segunda posición que tiene el francés Romain Bardet o mantener su casilla. Al final de la ‘loca’ y dramática jornada la estrella del pelotón mundial manifestó en la Web del Movistar Team.
“Es como si fuera un milagro de Dios, poder estar de hecho hoy aquí. Estaba muy mal, lo que pasa en mi cuerpo es difícil de explicar ahora. Hemos luchado todo el día, desde salida. He sufrido muchísimo y los compañeros me han ayudado fenomenal. Gracias a ellos me mantengo aquí, sobre la bicicleta. Siento cansancio: el cuerpo no va, no responden las piernas. Al finalizar las etapas de hecho es como si estuviese normal, pero el cuerpo no responde. Más que condiciones, he tirado de clase. La clase nunca se pierde. En algún momento sí he pensado en retirarme”, expresó.
Por su parte Alejandro Valverde comentó: “Ha sido un día no duro: realmente duro, como ya decía el otro día. Después de las caídas de Froome y Mollema la carrera ya iba lanzada y seguía tirando Astana, como era normal. La verdad es que más rápido ya no se podía ir. Iba Froome con problemas, pero es el más fuerte de la carrera. He llegado a ver la victoria bastante cerca, pero en la bajada se ha ido Bardet, al que hay que felicitar porque el descenso estaba peligrosísimo. Puede ser un buen día mañana para las alianzas, pues de hecho Astana ha hecho un gran trabajo y hay que felicitarles. Yo estoy disfrutando, dentro del sufrimiento que supone un Tour. Cada día es una ilusión, un disfrute. Parece mentira que haya corrido el Giro: las sensaciones son realmente buenas; ayer la crono la hice rápido, pero no a tope, y hoy estaba mejor. Las fuerzas están bien, pero las victorias de etapa son complicadas con el tiempo que llevo en la general”.
La jornada de mañana, penúltima y decisiva etapa de este Tour de Francia, espera con 146,5km entre Megève y Morzine. Los jueces: Joux Plane (HC) -11,6km al 8,5%-, habiendo superado antes dos ‘Primeras’ como la Colombière -11,7km al 5,8%- y la Ramaz -13,9km al 7,1%, ellos decidirán el 2º y 3º escalón del podio de París.
