“Decenas de miles deben ser devueltos. Uno tras otro. No puede haber beneficios jurídicos sin la devolución del dinero público, el dinero de todas y de todos”, afirmó el jefe de Estado.
Con relación a las víctimas de la crisis climática en el país, el mandatario enfatizó:
“Necesitaban de la atención del Estado y allí, en la entidad donde se guardaban los dineros para suplir las necesidades, hubo codicia, hurto, robo e indignidad”.
El presidente Gustavo Petro Urrego pidió este viernes a la Fiscal General de la Nación, Luz Adriana Camargo, no brindar beneficios jurídicos sin que haya la correspondiente devolución de los dineros públicos robados en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).
“Decenas de miles deben ser devueltos. Uno tras otro. No puede haber beneficios jurídicos sin la devolución del dinero público, el dinero de todas y de todos. Esa tiene que ser la garantía para el perdón que alguno de ellos me pidió a través de sus largas entrevistas en los medios de comunicación”, enfatizó el jefe de Estado.
Por eso, el mandatario afirmó: “Es a la Fiscal General, a la cual le pido en el comienzo de su cargo, que el primer resarcimiento, la primera garantía de verdad —si es que quieren negociar jurídicamente con la justicia para traer la verdad— es devolver hasta el último peso que se llevaron”.
El mandatario hizo la petición a la titular del ente investigador durante la ceremonia de transmisión de mando del nuevo Comandante del Ejército Nacional, general Luis Emilio Cardozo Santamaría, quien sucedió al general Luis Mauricio Ospina.
En ese sentido, agregó que la justicia debe garantizar que haya un resarcimiento a las víctimas por el hurto de los dineros que debían ser invertidos en la atención a los damnificados de la crisis climática.
“Ese perdón necesita de la verdad, de las garantías de no repetición y, fundamentalmente, del resarcimiento de las víctimas. La gente de Piojó, de La Mojana, del Sur de Bolívar; la gente de Mompox y Pinillos; de Rosas, en el Cauca; la gente de Providencia y San Andrés, de Mocoa, en el Putumayo”, manifestó.
Asimismo, se refirió a las víctimas de las inundaciones, de las sequías, de los huracanes y demás fenómenos naturales.
“Esas víctimas en Colombia necesitaban de la atención del Estado y allí, en la entidad donde se guardaban los dineros para suplir las necesidades, hubo codicia, hubo hurto, hubo robo e indignidad”, enfatizó.