De acuerdo con las cifras reveladas hoy por el DANE, la construcción de edificaciones siguió aportando al desempeño económico del país. Para la Presidente Ejecutiva de Camacol, Sandra Forero Ramírez, «a pesar de los desafíos de la economía y sus efectos en las decisiones de inversión de los hogares y las firmas, el sector mantuvo un volumen de actividad que le permitió generar un 6% más de valor agregado a lo largo del año».
Por segmentos, el crecimiento que generó la construcción de vivienda durante 2016 fue de 2.2%, y en el desarrollo de proyectos no residenciales se registró una variación de 10%.
La Ejecutiva del Gremio explica que los resultados en materia de vivienda se alinean con lo observado en la dinámica comercial y el inicio de obra de los proyectos. Del volumen de ventas de vivienda registrado durante 2016, solo se dio inicio a la construcción del 48% producto de una dinámica comercial moderada por las tasas de interés, en comparación con los últimos años.
«No obstante, el 52% restante de viviendas por iniciar generarán valor agregado, empleo y demanda de insumos durante 2017. Nuestra perspectiva es que se aceleren los procesos de inicio de obras y así lo insinúa el dato del mes de enero, cuando se registraron 16.105 iniciaciones de vivienda, cifra superior en 37% al promedio mensual registrado en 2016», asegura la Directiva.
Para el segmento no residencial, se destaca el positivo aporte del área en construcción en proyectos de comercio, seguido del segmento de hoteles, en los cuales se registraron variaciones de 1.6% y 8.6%, respectivamente. «En general la actividad no residencial ha jugado un papel central en la generación de valor agregado del sector en los últimos años. Nuevas oportunidades regionales para el desarrollo de áreas comerciales, destinos turísticos y la consolidación de un mercado de espacios corporativos en nuevos corredores regionales y con nuevos estándares, reflejan esos resultados», dice la Presidente de Camacol.
Se espera que durante 2017 los elementos que ayudarán a mantener las positivas tasas de crecimiento del sector se consoliden. En el segmento habitacional el aporte de los programas de vivienda será fundamental y así se ha venido reflejando en la comercialización de los proyectos. Sumado a eso, hay perspectivas más favorables en materia de tasas de interés. En los destinos no residenciales, las estrategias públicas de construcción de aulas escolares serán favorables para equilibrar una moderación en ese segmento de la actividad.
«Desde el Gremio vemos oportunidades para mantener el dinamismo del sector. La política de vivienda social y las modificaciones recientes anunciadas para el programa Mi Casa Ya, los estímulos a la compra en segmentos medios y el plan de construcción de aulas escolares son elementos a tener en cuenta. En esa ecuación, se deben sumar las acciones de tipo local que las administraciones municipales ejecuten para mantener un buen clima de inversión, estabilidad jurídica y, sobre todo, más construcción de proyectos que generen empleo y desarrollo regional», concluye Sandra Forero Ramírez.