En varias columnas he mencionado la grata fortuna de contar con la amistad de una persona de un valor incalculable, un hombre límpido y transparente que generosamente siempre está dispuesto a compartir experiencias, conocimientos y sabiduría que solamente da los años y amistad sincera; me refiero al gran Carlos Francisco Falla.
Éste señor tiene una hoja de vida riquísima, que se alimenta con formación académica, cargos importantes con el Estado y con empresas privadas, entre otros; sin embargo, es una persona sencilla, cordial y humilde.
Hablar con Carlos Francisco es de las prácticas más agradables que existen, pues a pesar de sus amplios conocimientos en muchísimos temas, es considerado con quienes no poseemos esa riqueza intelectual y de manera muy sutil va compartiendo mucho de eso que sabe, convirtiendo cada charla en una enriquecedora tertulia que permite cruzar información importante para todos.
Dentro de lo que hemos tratado en un sinnúmero de oportunidades, es de la importancia de aunar esfuerzos para sacar adelante el Huila, de la mano de otros departamentos vecinos como el Caquetá y el Tolima, por lo que insiste permanentemente en hablar de territorio más que de región.
La sinergia territorial permite que los clamores sean expresados con mucha más fuerza y así mismo, sean escuchados con mayor vehemencia en el gobierno central, amo y señor del presupuesto nacional.
El Huila ha padecido grandes problemas a raíz de la violencia, la misma que ha arropado al Caquetá y al Tolima. Esa guerra de muchas décadas que ha frenado el desarrollo de toda esta parte del territorio nacional y que nos ha mantenido casi estancados durante medio siglo.
En esta importante época electoral, es preciso que quienes estén aspirando al cargo de Gobernador de cada uno de estos departamentos, tenga la visión y la intensión de querer trabajar de la mano, en medio de una propuesta de paz, seguridad y justicia social.
La razón por la cual titulo esta columna de la manera como lo hago es porque debemos comprender que para lograr mejores y mayores avances, es importante la unión, en medio de un discurso pragmático más que político con buenas y sinceras intenciones.
Nuestros vecinos necesitan de nosotros, pero nosotros también necesitamos de nuestros vecinos, como verdaderos hermanos que se apoyan y respaldan. Pensemos en el territorio Huila – Tolima – Caquetá y con seguridad nos va a rendir más.
Gracias Carlos F.
—
