En estos tiempos, nadie cree en los políticos en el país. Son tantos los casos de corrupción que ocurren a diario, que no vale la pena votar por los mismos de siempre.
La gente se desmotiva, y sin embargo, vuelve a votar por quien le prometió esta vida y la otra, por quien le ayudó con el recibo del agua o por quien le ofreció terminarle de techar su casa. Pero nadie ve más allá, nadie se imagina que lo están comprando, y quien comete aquel delito, es capaz de eso y mucho más.
A Rodrigo Lara Sánchez, hoy candidato a la Alcaldía de Neiva, lo conocí hace unos seis años, en una entrevista cuando era aspirante a la Cámara de Representantes por el movimiento de Sergio Fajardo. Uno de mis hermanos, que lo conocía desde la Universidad del Cauca, me hablaba muy bien de él, y me había formado tal expectativa, que estaba afanado por conocerlo y escucharlo.
Rodrigo no lo ha tenido todo, como muchos piensan. Sus logros y éxitos se los ha ganado con tesón, y desde su época de universitario, se vislumbraba como un gran profesional y ser humano. Escucharlo y creerle fue fácil; es sincero, habla con confianza y sabe dónde está parado; tiene esa facilidad de llegarle a la gente, de convencer, de generar amistad, simpatía y mucha admiración. Es político y está haciendo política, y creo en él, y digo que creo porque no es un político más, no se ha dejado permear de la politiquería de provincia, y quien se haya desencantado de su discurso, es porque esperaba lo que esperan de todo político tradicional.
Una contienda electoral como la que se vive ahora, es decepcionante. Las agresiones, las calumnias, las falsas acusaciones y los pasados malintencionados, hacen que se forme una guerra entre bandos, que al final, quien más pierde es el pueblo. Pero se hace daño, se ensucia el buen nombre, la honra y la imagen de una persona. Y Rodrigo sí ha tenido que sufrir esos ataques por cuenta de los adversarios, que no tienen de dónde agarrarse realmente, y recurren a la mentira, para repetirla y repetirla hasta volverla verdad, para que la opinión pública y el pueblo del común, caigan en la rumorología.
Pero vale la pena decir, que con orgullo puedo hablar de una persona como el médico Lara Sánchez, pertenecer a su equipo y a su confianza. Solo el tiempo y las acciones revelan las verdades, y Rodrigo como futuro mandatario de los neivanos, podrá demostrar de qué está hecho.
Está muy preparado, tiene la experiencia para servir a los demás, a eso se ha dedicado la mitad de su vida, y muchos pensarán que tiene muchos títulos, pero la formación de servir no es de la enseñanza en la academia, es la educación en el hogar, y a Lara desde niño se la inculcaron, y eso lo refleja en su caminar por la vida política hoy en día. Como el mismo lo dice, tiene una hoja de vida transparente y unas manos limpias, y así está demostrado; sus opositores no tienen de dónde agarrarse, solo el desprestigio es su única arma, pero la razón se la dará el tiempo a quienes se equivocaron con tales acusaciones.
Sobra decir que el éxito de una buena administración de Lara Sánchez, es rodearse de gente limpia y muy preparada, si es el caso, más preparada que él, para que la ciudad siga adelante y salga de atraso provincial con el que nos ven.
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Por: Alejandro Cabrera Collazos – alejandrocabrera23@gmail.com