En extrañas circunstancias falleció a los 77 años, Vitaly Melnikov, después de comer accidentalmente hongos venenosos, semanas después de que una nave espacial rusa no tripulada se estrellara en la superficie de la Luna.
Dicho suceso fue considerado vergonzoso para un país que fue el primero en enviar a un hombre al espacio.
Las primeras informaciones indican que se trató de un envenenamiento. “Fueron hongos no comestibles”, indicó el periódico local Moskovsky Komsomolets, en una información replicada por los medios británicos Daily Mail y Mirror.