Que las EPS van a desaparecer, es una realidad hoy día con todos estos cambios que estamos viviendo y, sobre todo, con todos los malos manejos financieros que el país está descubriendo luego de décadas de ocultamiento y de billones de pesos perdidos del erario.
Pero también es una oportunidad para los hospitales o centros de atención médica del Estado para crecer y brindar una mejor atención a los pacientes.
Durante años las Empresas Sociales del Estado, ESE, como la Carmen Emilia Ospina de Neiva, se vieron obligadas a vivir de las migajas que dejaba el administrador de turno de las diferentes EPS que contrataban con esta entidad de salud de los neivanos.
Pero, ¿qué ha pasado con esta entidad hospitalaria?, está estancada, no ha crecido, no ha evolucionado, y es sabido que toda empresa debe evolucionar para no ir a la extinción. Por eso, ya es hora de tomar las riendas de la salud del principal centro del primer nivel de atención médica de nuestro Municipio de Neiva.
Todos sabemos que la ESE Carmen Emilia Ospina, presta los servicios de salud al pueblo neivano, pero en lo básico, como son la consulta externa y odontológica, urgencias, hospitalización bajo la atención de médicos generales en el centro de salud de Canaima. Pero es necesario y ya es hora de crecer, como lo han hecho otras empresas de salud en Neiva. Los neivanos no pueden esperar más el cambio que se merece y que puede hacerse en la ESE CEO.
Atender gripas y dolores de cabeza está bien para el pueblo en general, pero ¿por qué no brindar más servicios que requieran los neivanos? Son muchas las personas en Neiva que sufren de dolencias cardiacas y deben ser remitidas a un nivel superior de atención médica, donde la respuesta es, “no tenemos cupo”.
Sin embargo, aun así, el médico con tal de que este paciente cardiópata (con dolencias cardíacas), sea atendido, es llevado a estas instituciones, donde deben ser dejados sobre camillas y en corredores de las diferentes clínicas de Neiva, violando uno de los principios de atención en salud, que es una atención digna y humana.
Esto se acabaría fácilmente, si el alcalde de Neiva, sus concejales y la gerencia de la ESE Carmen Emilia Ospina, tomaran la decisión de crear una UCI (Unidad de Cuidados Intensivos) para dolencias cardiacas, en el centro de salud del CAIMI, que es el que se encuentra al norte de la ciudad de Neiva, y que cuenta con una infraestructura física que perfectamente daría cabida a más de 12 camas de cuidados intensivos.
Las camas con las que cuenta en este momento en el servicio de hospitalización del segundo piso, son adecuadas para una Unidad de Cuidados Intensivos. La inversión que haría la administración municipal para este propósito sería mínima, unos cuantos monitores, y algunos equipos biomédicos y separaciones para dar cumplimiento a lo requerido por el sistema de habilitación que exige el Ministerio de Salud y Protección Social.
Una UCI es considerada como una urgencia y no se requiere contrato con ninguna EPS para atender los pacientes que requieran ser ingresados por problemas cardiacos.
Una pregunta que muchos se hacen: ¿Con qué pacientes llenaríamos esta Unidad de Cuidados Intensivos?; sencillo, con todos esos pacientes cardiópatas que remitimos al Hospital Universitario y a otras IPS de Neiva, de mayor nivel de complejidad en salud.
Además, podríamos recibir también pacientes de los municipios aledaños a la capital huilense, a los que tanto se les dificulta el conseguir una cama en UCI luego de sufrir afectaciones cardíacas.
Con una ocupación de 10 camas mensuales, la ese podría estar recaudando alrededor de $700.000.000 millones de pesos mensuales. Muchos se preguntarán, pero ¿quién atendería estos pacientes?; hay muchos internistas y anestesiólogos, egresados de la Universidad Surcolombiana, con los cuales he hablado, y ellos refieren que con gusto ayudarían a este proyecto. Así mismo, la ESE Carmen Emilia Ospina cuenta con un internista para atender pacientes. Este profesional podría ser parte de este equipo de la UCI.
Además, tenemos a la USCO, que ofrece especialización en anestesiología y medicina interna, donde sus residentes serían un apoyo para brindar atención en esta nueva Unidad de Cuidados Intensivos. Ellos pondrían en práctica sus conocimientos y el pueblo huilense saldría beneficiado.
Las condiciones están dadas; ya es hora de perder el miedo y crecer. Neiva lo necesita, el pueblo neivano lo aclama y la ESE Carmen Emilia Ospina lo puede hacer. Es hora que a la ESE dejemos de verla como un simple centro de salud chico, donde se recibe todo y se remite lo grave. Las Unidades de Cuidados Intensivos salvan vidas y son una necesidad en el pueblo neivano.
Ya es hora de crear la UCI en la ESE de los neivanos.
Por una Neiva más sana, sí, a la Unidad de Cuidados Intensivos de la ESE Carmen Emilia Ospina de Neiva.
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Por: Héctor Hernán Sánchez Ortigoza
Médico y cirujano, egresado USCO
Especialista en gerencia, auditoría y control interno de instituciones de salud
E-Mail: hectorsanchezortigoza@gmail.com