SALUD. En 1977 se implantó exitosamente en Viena el primer implante coclear multicanal en el mundo. Hoy, 38 años después, esta valiosa invención ha permitido a niños y adultos mejorar su capacidad auditiva y por ende, tener una mejor calidad de vida.
Colombia, 19 de febrero – En Colombia, 17 de cada 100 colombianos con discapacidad tienen limitaciones permanentes para oír (DANE – Censo 2005). Para personas con pérdida auditiva de severa a profunda, un implante coclear puede ser la solución. Estos usuarios son capaces no sólo de oír sonidos ambientales de forma natural sino también de comprender sonidos del habla y la música, permitiéndoles comunicarse con su entorno y lograr mayores oportunidades sociales, educacionales y profesionales. “La idea de abrir el mundo de los sonidos a personas que vivían en silencio pudo sonar absurda en algún momento dado. Hoy es sobrecogedor ver a todos los bebés, niños y adultos de todo el mundo a los que se les ha abierto las puertas al sonido y al habla gracias a esta tecnología», manifiesta el Dr. Franco Portillo, MED-EL Regional Manager Latinoamérica Central y del Norte.
UNA BREVE HISTORIA DE LA EVOLUCIÓN DEL IMPLANTE COCLEAR
Una primera versión de un implante coclear fue implantado en Francia en 1957 – razón por la que se conmemora ese día como el Día Internacional del Implante Coclear – por los Doctores André Djourno y Charles Eyrès, quiénes insertaron un hilo de cobre dentro del oído interno, la cóclea, de un paciente, logrando que fuera capaz de percibir el ritmo del lenguaje.
En 1977 en Viena, ocurre algo que definió el inicio de la estructura y el funcionamiento del implante coclear como lo conocemos hoy en día: la Doctora en Ingeniería Eléctrica y actual CEO de MED-EL, Ingeborg Hochmair, inició junto con su esposo el Profesor Erwin Hochmair el desarrollo del primer implante coclear multicanal del mundo. Este implante incorporaba un electrodo largo y flexible que permitía, por primera vez, estimular el nervio auditivo con señales eléctricas en gran parte de la cóclea.
Una nueva versión de este dispositivo, marcó el siguiente hito en el desarrollo de los implantes cocleares en 1979: la comprensión de palabras y frases sin necesidad de leer los labios en entornos silenciosos gracias a un procesador de sonido portátil. En 1991, la intensa y constante innovación daría lugar al primer procesador retroauricular del mundo.
El siguiente avance importante fue el desarrollo de un implante coclear de alta tasa de estimulación de la cóclea y con un sistema de codificación de sonido especial para poder percibir sonidos de manera más natural. Desde 1994 en adelante, este dispositivo permitió a los usuarios un mejor rendimiento. Incluso permitiéndoles mantener conversaciones por teléfono.
MED-EL también ha logrado desarrollar una serie de electrodos flexibles diseñados para preservar la cóclea y sus delicadas estructuras. Además, la larga guía de electrodos puede insertarse profundamente dentro de la cóclea para alcanzar una cobertura coclear completa. Así, el alcance de estimulación es más completo para tener el mayor espectro de sonido y una calidad auditiva mucho más rica y natural.
Otro hito ha sido el desarrollo del primer procesador de audio en una sola pieza, el Rondo. Gracias a su diseño totalmente integrado puede llevarse con discreción al quedar cubierto por el cabello. Las investigaciones más recientes han llevado a MED-EL a diseñar un implante coclear, que ofrece la máxima seguridad disponible en materia de resonancias magnéticas. Este nuevo sistema se encuentra en proceso de registro en Colombia.
EL IMPLANTE COCLEAR HOY EN DÍA
El implante coclear es para personas con pérdida auditiva neurosensorial de severa a profunda. El implante coclear consta de dos partes: un procesador de audio externo, situado detrás de la oreja; y un implante interno, el cual se coloca debajo de la piel mediante una cirugía. El procesador externo está sujeto por medio de un imán a la parte interna. El procesador de audio capta los sonidos y los transmite al implante. El implante envía esta información sonora en forma de pulsaciones a los electrodos dentro de la cóclea, que estimulan directamente el nervio auditivo; este llevará la información al cerebro, donde será percibida como sonido.
El implante coclear es el primer sustituto de un órgano sensorial: el oído. El rigor de la investigación realizado por MED-EL durante este tiempo ha permitido transformar la vida de miles de personas en el mundo. “Todos estos logros han sido posible gracias a años de investigación y compromiso de la compañía en buscar siempre mejorar y traer más beneficios y oportunidades para una nueva y mejor calidad de vida de nuestros pacientes”, afirma Franco Portillo, MED-EL Regional Manager Latinoamérica Central y del Norte.